En Morena se repite la historia del PRD
Las últimas semanas, el partido Morena recibió una fuerte sacudida por la renovación de su dirigencia.
Que si se debe hacer una encuesta, que si la encuesta es válida o no, que si mejor se queda Alfonso Ramírez Cuellar, los escándalos por corrupción de Yeidckol etc…
La elección del nuevo presidente de Morena ha sido un verdadero cochinero y recuerda a los peores tiempos del prácticamente inexistente PRD.
Después de concluir que si se debía hacer una encuesta a la militancia y que medio mundo se registrara para ser presidente. Los finalistas de la contienda resultaron ser Porfirio Muñoz Ledo (PRI)y Mario Delgado (PRD)
Así es, la lucha final para decidir el futuro del partido del presidente, estuvo en manos de dos ex militantes de la mafia del poder.
Bueno pues el fin de semana se dieron a conocer los resultados de la presunta encuesta a la militancia y con una reñida competencia ganó Porfirio (25.34%) sobre Mario (25.29%) en tercer lugar una tal Adriana Menéndez que nadie conoce.
La primera reacción por parte de Porfirio fue autoproclamarse presidente y afirmar que tomaría protesta el día de hoy a las 12:00. Mario Delgado por su puesto arremetió en su contra.
La realidad es que ambos represan los intereses presidenciales de un segundo.
Porfirio representa los intereses de Ricardo Monreal y Mario Delgado los de Ebrad, así que esta es una pelea no por la presidencia de Morena, sino por la presidencia de México en 2024.
El grave problema que se avecina con este conflicto interno, es que la disputa afectará al partido por completo, se avecina una ruptura similar a la que vivió el PRD, los resultados de esos conflictos derivaron en una desaparición parcial del partido.
De continuar con este camino, Morena se prepara para una fuerte fractura en 3 fuertes grupos, los que apoyan a Monreal, los que apoyan a Ebrad y los fundadores que de plano quieren salirse y formar un partido López obradorista.