Putin vuelve a tomar medidas drásticas
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, extendió hoy hasta finales de 2024 la vigencia del embargo contra los alimentos perecederos occidentales, vigente desde 2014.
El correspondiente decreto presidencial fue publicado hoy en el portal de información legal de la administración pública de Rusia.
El embargo limita la entrada al país de una serie de productos agrícolas, materias primas y alimentos de los países que impusieron sanciones a Rusia tras la anexión ilegal de la península ucraniana de Crimea en marzo de 2014.
El decreto establece prorrogar las “medidas económicas especiales” establecidas por el presidente ruso el 6 de agosto de 2014 “con el objetivo de garantizar la seguridad de la Federación Rusa” hasta el 31 de diciembre de 2024.
Putin, que ordenó hace un año la anexión de otras cuatro regiones ucranianas, prolongó por último vez el embargo en octubre de 2022.
Occidente impuso las primeras sanciones a Rusia tras la anexión de Crimea, medidas que reforzó tras el inicio del conflicto armado en el este de Ucrania y el apoyo de Moscú a las milicias prorrusas de las regiones de Donetsk y Lugansk.
Putin prolonga hasta finales de 2024 el embargo a los alimentos occidentales
Rusia respondió con contrasanciones que limitan la importación de una serie de mercancías producidas en esos países que Moscú considera inamistosos.
La primera vez que Rusia impuso este embargo alimentario fue en agosto de 2014 contra la Unión Europea, EU, Australia, Noruega y Canadá, a los que sumaría en 2015 Albania, Montenegro, Islandia y Liechenstein, y en 2016 la propia Ucrania.
A los productos cárnicos, lácteos, pescado, verduras y frutas, Moscú les añadió en 2017 cerdos vivos y diversos subproductos y grasas animales.
Además, Putin ordenó posteriormente que todos los productos perecederos occidentales que entren ilegalmente en el mercado ruso debían ser destruidos.
El líder ruso ha admitido que el embargo es, en realidad, una medida proteccionista encaminada a proteger el mercado agroalimentario ruso, incapaz de competir con las exportaciones occidentales.
Muchos productores rusos están interesados en que el embargo a Occidente se prolongue el mayor tiempo posible.