Parlamento Birtánico aprueba definitivamente el Brexit
A principios de enero, la Cámara de los Comunes, donde el líder conservador tiene una aplastante mayoría, dio luz verde al proyecto de ley sobre la salida, prevista para el 31 de enero, antes de enviarlo a la Cámara de los Lores, formada por miembros vitalicios no electos.
En los últimos días, esta cámara adoptó cinco enmiendas al texto, infligiendo sendos reveses al gobierno, especialmente en lo que respecta a los derechos de los ciudadanos de la Unión Europea que residen en el Reino Unido y a los niños refugiados no acompañados.
Pero a nueve días del Brexit, dichas enmiendas fueron rechazadas por los diputados cuando el proyecto de ley regresó a la Cámara de los Comunes el miércoles.
Los miembros de la Cámara Alta dieron su brazo a torcer finalmente en una segunda votación.
Del lado europeo, ahora le toca al Parlamento Europeo, probablemente en una votación el 29 de enero.
El Brexit es ante todo una gran victoria personal de Johnson, que formó parte del gobierno anterior, también conservador, de Theresa May, y que se bajó a tiempo para cosechar los frutos de la crisis gubernamental.
Volvió como primer ministro, negoció ásperamente con el Parlamento y con sus socios de la Unión Europea, y cuando no pudo lograr el Brexit en la fecha prevista, convocó elecciones, que ganó de forma abrumadora.
El Reino Unido abandonará la Unión Europea más de tres años y medio después del referéndum de junio de 2016, y tras tres caóticos aplazamientos.
El acuerdo entre Londres y sus 27 socios europeos busca asegurar una ruptura suave estableciendo las condiciones del divorcio y un periodo de transición hasta finales de 2020.
Durante esa etapa, el Reino Unido seguirá aplicando las reglas europeas.
En materia comercial, Londres sólo ambiciona un simple acuerdo de libre comercio.