El Costo por Adquisición de Cliente (CAC) es uno de los indicadores más valiosos para determinar la viabilidad de un negocio.
Este representa los resultados de la inversión económica que se ha hecho en la empresa para cada adquisición de un cliente nuevo.
La inversión puede estar representada en diversos conceptos: Fuerza de ventas, redes sociales, campañas de marketing análogas entre otras.
En términos básicos, son todos los gastos que has realizado en campañas de marketing entre los clientes nuevos adquiridos.
El objetivo es que el CAC sea progresivamente más bajo a través del tiempo y, que tu empresa tenga un buen porcentaje de retención de clientes, es decir, que no dependa siempre de la adquisición de nuevos consumidores.
Fórmula para calcular el CAC
La fórmula para calcular el CAC es la siguiente:
- Lo esperado es que Costo por adquisición de cliente tenga una relación positiva de 3 a 1, es decir que al menos el 30% de lo invertido se traduzca en clientes nuevos.
- Un CAC ideal debería de tener una pendiente decreciente a través del tiempo.
- Para conseguir mejores niveles de CAC es primordial la experimentación de acuerdo a cada negocio.
- El CAC puede ser complicado de medir, ya que no siempre hay certeza de como fueron adquiridos los clientes.